Cucurucho

Una palabra donada por Naia Del Castillo

cucurucho.
(Del it. dialect. cucuruccio).
1. m. Papel, cartón, barquillo, etc., arrollado en forma cónica, empleado para contener dulces, confites, helados, cosas menudas, etc. U. t. en sent. fig.
2. m. Capirote cónico de penitentes y disciplinantes.
3. m. Á. Caribe y Am. Cen. Parte más alta de un árbol, de una casa, etc.
4. m. Col., Hond., Nic., P. Rico, R. Dom. y Ven. colina1.
5. m. C. Rica y Hond. cumbre (de un monte).


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Cucurucho o la experiencia de ser un cono con experiencia
¿Por qué se ha pasado del cono al cucurucho? La forma es estrictamente la misma. Efectivamente, no hablamos de «cono» sino de «cucurucho» al referirnos al barquillo del helado, al capirote de los penitentes de Semana Santa o al capuchón de los miembros del Ku Klux Clan. El cucurucho es la experiencia de un cono; el cono materializado. Una figura geométrica, abstracta, que ha encontrado múltiples formas y materias en nuestra realidad mundana; con sus simbolismos y significados. Por lo tanto, además de provenir de un sólido de revolución generado por el giro de un triángulo rectángulo alrededor de uno de sus catetos, el cucurucho tiene como característica fundamental el empirismo, la experiencia que tal vez empezó al enrollar un cartón en forma de cono para dar vida a lo que un dialecto italiano llamó cucuruccio. Movimiento y empirismo.

Las manipulaciones a las que un matemático somete a un triángulo forman parte de la definición que por analogía los miembros de OuLiPo hacen de su empresa. El llamado Ouvroir de Littérature Potentielle (taller de literatura potencial) fue fundado hace más de cincuenta años por Raymond Queneau y François Le Lionnais y los autoproclamados acólitos son otros matemáticos-literatos y literatos-matemáticos como Marcel Duchamp, Georges Perec e Italo Calvino. Se trata de explotar las potencialidades lingüísticas en un proceso infinito, experimentando con la gramática, la fonética, la sintaxis, la matemática, la semántica, sin jerarquizar ninguno de los medios planteados. Un universo artístico ecléctico en el que nada es estático, en el que no se parte de pilares fijos sino del planteamiento de dificultades (contraintes). Cada mes se convoca una reunión en la que se propone un orden del día y en la que, por lo menos hasta hoy, nunca ha faltado una acción creativa. Por ejemplo, aquí tenéis la del mes de noviembre de 2012 en la que se propone hacer la descripción de una persona dibujando el retrato de la misma mediante los espacios del texto (entre las palabras y al final de las líneas). Os invito a ver los resultados en la página mencionada en la leyenda de la imagen o pulsando aquí:
Fuente: http://www.oulipo.net/contraintes/docs/portrait-en-creux
Parafraseando a Perec, me parece superfluo exponer los presupuestos teóricos de una actividad que tiene como característica principal el ser empírica (1): Es puro intentar, un ensayo continuo cuyo objetivo, si es que puede llamarse así, es demostrar el movimiento caminando(1). A menudo el gesto se inicia a partir de un texto-raíz (texte-souche) cuyos tronco y ramificaciones pueden extenderse hasta el infinito. Así pues, por ejemplo, se llevan a cabo manipulaciones elementales y trituraciones de frases de Proust o de Shakespeare que son sometidas a ablaciones, variaciones minimalistas, antinomias…  Todo tipo de operaciones para comprender el funcionamiento del lenguaje mediante un trabajo de observación y de creación constantes.
En este contexto de experiencia del lenguaje y de preocupación por la evolución del cono de lo abstracto a lo empírico, no puedo menos que proponeros detenernos en un texto de una oulipienne llamada Michèle Audin. Matemática integrante del grupo desde 2009, es una militante por la integración de la ciencia en la cultura y en la disolución de las fronteras que las han separado de forma tan explícita durante toda su historia moderna y contemporánea. Mai quai conti es un relato en el que expone las relaciones entre la Academia francesa de la ciencia y el Municipio de París. Para ello diré -arriesgándome a estropear la experiencia disecándola- que se percibe una receta compleja y armónica en la que se conjugan diferentes operaciones:
  • Contexto: reuniones semanales de la Academia durante el mes de marzo de 1871, en plena guerra franco-prusiana;
  • Estructura 1: inspirada en las sextinas (2);
  • Estructura 2: la propiedad matemática de las secciones cónicas expuesta por uno de los miembros de la Academia de la ciencia (Michel Chasles) se va dibujando silenciosamente capítulo a capítulo. Reunión a reunión, los trayectos de los protagonistas desde sus hogares parisinos al Louvre, sus conversaciones, sus rencillas, sus relaciones dentro y fuera del círculo científico, se plasman en discretos dibujos en los que van apareciendo silenciosamente los puntos y rectas explicativos de lo que al final se traduce en la Teoría de las Cónicas. 

Una breve pausa para los que, como yo, no están acostumbrados a hablar de «secciones cónicas» a la hora del café (hola, EGB, ESO y Wikipedia).

> Esto es un cono con sus tipos de secciones cónicas. Se denomina sección cónica (o simplemente cónica) a todas las curvas intersección entre un cono y un plano.  

> Es decir, una sección cónica es la intersección de un plano y un cono.
Se clasifican en cuatro tipos: elipse, parábola, hipérbola y circunferencia.

Fin de la pausa.

La Teoría de las cónicas establece que si elegimos cuatro puntos de una cónica (A, B, C, D) desde los cuales trazamos:

Fuente: http://blogs.oulipo.net/ma/

– por un lado, 4 tangentes que generarán 4 puntos (A’, B’, C’, D’) sobre una quinta tangente,

– y, por otro, 4 rectas que confluyen en un quinto punto (P), 

… entonces la relación anarmónica entre estas 4 rectas será igual a la de los 4 puntos generados sobre la quinta tangente.

  

Para acabar con este episodio, decir que este texto dará pie a una nueva proposición de dificultad o contrainte para los oulipiens: construir un texto en el que las relaciones entre los personajes vengan dictadas por las posiciones de los puntos una una figura geométrica extraída de un teorema de Pascal

Este juego no permite metáforas. Lástima. Me habría sentado bien extraer una conclusión útil de todo esto. Sin embargo, sí permite poner de manifiesto… algo. Constatemos que:
1. No sé qué es una «relación anarmónica» en matemáticas y viendo el tipo de definiciones con «A», «x», y letras griegas que he encontrado, necesitaría a un amigo, unas cuantas semanas y una gran pizarra para entenderlo y creer que puedo decir algo al respecto. Por eso no digo nada.
2. Por otro lado, viendo las relaciones establecidas entre todos los personajes del relato de Michèle Audin, los entornos, los caminos recorridos, las arquitecturas descritas, así como los puntos de choque, encuentros y tangencias, tal vez -repito- TAL VEZ, sean una sección cónica y sus puntos los únicos capaces de reflejar en unos pocos centímetros cuadrados la simultaneidad de presentes y de acercamientos posibles entre personas en un contexto similar pero no idéntico
3. Así pues, el cono, la entidad abstracta de la que parecemos huir al decir «cucurucho» para referirnos, por ejemplo, al barquillo del helado, nos ha acercado a una realidad empírica que rompe con la dicotomía planteada en Barrio Sésamo; explica la posibilidad de estar dentro y fuera al mismo tiempo, de que ambos estados sean simultáneos; explica que podamos sentirnos en casa estando fuera de ella sin que por ello no estemos deseando regresar cada día; permite que un corrupto pueda parecerle majo a alguien a la hora del café sin que por ello éste no siga invirtiendo en armas o enviando fondos a … llamémoslo Suiza; que el amor y el odio puedan darse a la vez.

William Strang, Scottish, 1859 – 1921
Self-Portrait, 1897
drypoint, Rosenwald Collection, 1943.3.7996
National Gallery of Art / NGA Images

Finalmente, para contestar a la pregunta del principio (¿Por qué se ha pasado del cono al cucurucho?), creo que la respuesta está en el tacto: utilizamos «cucurucho» para las formas de cono que podemos tocar. No sé si la famosa dieta tendrá que ver con ello pero, mientras continuemos refiriéndonos de este modo a todo lo tangible, propongo que no olvidemos que, para lo demás, siempre nos quedarán las tangentes.
(1) Anthologie de l’OuLiPo, Ed. de Marcel Bénabou et Paul Fournel, Éditions Gallimard, 1999, p. 7
(2) Sextina

  1. f. Composición poética que consta de seis estrofas de seis versos endecasílabos cada una y de otra que solo se compone de tres.
  2. Cada una de las estrofas de seis versos endecasílabos que forman esta composición:




Gracias a la aportación de un lector de Se Me Ha Caído El Diccionario: 

Alejandro Entrambasaguas ha elegido esta palabra donada por Naia Del Castillo para esta entrada:

Me quedo con cucurucho.
Pienso en un cucurucho y veo la trayectoria profesional de mucha gente.
O también veo la amistad.
Respecto a la amistad y el cucurucho pienso que los amigos que se hacen de niño y de adolescente se pueden mantener fácilmente en el futuro. El cucurucho va creciendo y aumentando su diámetro pero nunca pierde ni abandona el principio.

| Textos: Irene Pomar |

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